Cádmio y Plomo Descubiertos en Niveles Alarmantes en vasos para niños
Una investigación exhaustiva ha sacado a la luz una preocupante verdad: los vasos de vidrio que adornan nuestras mesas contienen una dosis letal de peligros. Se han detectado niveles excesivos de cádmio y plomo en el esmalte decorativo de estos vasos, especialmente aquellos que ostentan imágenes de superhéroes icónicos y personajes del universo del Mago de Oz.
Los análisis, encargados por The Associated Press de EEUU, han revelado que estos vasos para niños, manufacturados en China y adquiridos en la reconocida tienda Warner Brother Studios en Burbank, California, contienen entre un 16 y un 30.2% de plomo. Estos valores superan en hasta mil veces los límites federales establecidos para productos destinados a niños, que es de apenas un 0.03%.
Pero la alarma no termina ahí. Además del plomo, estos vasos también contienen cantidades significativas de cádmio, un metal aún más peligroso, cuyos niveles no están regulados por las autoridades federales en productos con superficies decorativas.
Marcas populares como Coca-Cola, Walt Disney, Burger King y McDonald’s se encuentran en el punto de mira debido a su asociación con estos productos peligrosos. Y no es para menos, ya que se ha demostrado que los metales tóxicos presentes en el esmalte de estos vasos pueden desprenderse con el uso normal y terminar en las manos de los niños, quienes podrían llevarlos a la boca, causando un riesgo grave para su salud.
La situación se agrava aún más con el reciente retiro de productos por parte de McDonald’s, quien solicitó la devolución de 12 millones de vasos debido a la liberación de cádmio de las imágenes de sus personajes, especialmente los relacionados con la película «Shrek».
Pero la preocupación no se limita a una sola marca o franquicia. La investigación de AP, realizada en colaboración con ToyTestingLab, ha revelado que la contaminación por metales peligrosos en productos de vidrio va más allá de lo que se pensaba. Los análisis muestran niveles alarmantes de plomo en productos destinados a los más pequeños, superando con creces los límites de seguridad establecidos.
En este sentido, se requiere una acción inmediata por parte de los reguladores y las empresas para abordar este problema de salud pública. Es fundamental garantizar la seguridad en productos como los vasos para niños y tomar medidas concretas para prevenir la exposición a metales tóxicos como el plomo y el cádmio en el futuro.
Evita adquirir productos muy llamativos con tonos rojos y fuertes, especialmente los que se encuentran en comercios cuya manufactura no pasan los controles europeos establecidos.
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